Salsa de almendras casera y cremosa, ideal para carnes y pescados

Esta receta de salsa de almendras casera y cremosa es ideal para carnes y pescados, alegrando los platos principales e incluso los aperitivos de un menú especial. Es muy fácil de preparar y su textura queda muy suave y apetecible y su sabor es de lo más navideño aunque eso no quita que pueda utilizarse el resto del año. Si te sobra siempre puedes mantenerla varios días en la nevera e incluso congelarla.

Ingredientes para preparar salsa de almendras casera y cremosa, ideal para carnes y pescados (unos 400-500 gr de salsa):

Preparación, cómo hacer salsa de almendras casera y cremosa, ideal para carnes y pescados:

    1. Pon las almendras en un cazo con un poco de aceite de oliva (un par de cucharadas soperas) a fuego suave y ve moviendo el cazo de vez en cuando para que se doren de manera uniforme. Las almendras y el aceite van acumulando mucho calor así que cuando empiecen a dorarse deberás vigilarlas muy de cerca ya que pueden pasar de estar doradas a quemadas en cuestión e un minuto. Un truco para evitarlo es apartar el cazo del fuego cuando empiecen a estar doradas ya que con el calor que aún queda se terminan de dorar. Resérvalas en un recipiente aparte.
    2. Corta las rebanadas de pan en trocitos y cocínalas a fuego suave en el aceite de las almendras hasta que se doren y estén crujientes. Déjalos junto a las almendras, manteniendo el aceite en el cazo.
    3. Pela la cebolla y pícala finita. Haz lo mismo con el diente de ajo.
    4. Mantén el fuego suave y echa el ajo en el cazo. Muévelo durante unos segundos y enseguida incorpora la cebolla junto con un poco de sal. Cocínala algo menos de 10 minutos o hasta conseguir que la cebolla esté tierna y ligeramente transparente, apenas empezando a dorarse.
    5. Machaca un poco las almendras en un mortero y añádelas al cazo junto con el pan y cocínalo todo junto 3 minutos.
    6. Incorpora el vino blanco, sube el fuego para que esté alto y espera 2-3 minutos a que se evapore el alcohol.
    7. Añade el caldo y cocina a fuego suave 15 minutos. Recuerda utilizar el caldo más adecuado según la vayas a utilizar. Si vas a servirla con varios platos (ya que sale gran cantidad), un término medio neutro es utilizar caldo de verduras o de pollo, aunque si claramente la quieres para servir con pescados o mariscos lo ideal es utilizar caldo de pescado.
    8. Tritura la salsa con una batidora de mano, de vaso o un robot hasta que esté fina y con la textura que más te guste. Yo a veces le he tenido que añadir más caldo para que quedase menos densa, pero esto ya va en gustos.
    9. Pruébala por si tienes que rectificarla de sal.

Fuente: https://www.recetasdeescandalo.com/